Ojalá el amor fuera con o una cantimplora,
que se vuelve a llenar cada que se acaba el agua,
pero no;
es como una hoguera,
si se mantiene la llama todo va bien,
si te descuidas y dejas que casi muera
tal vez lo salves dándole más combustible
pero cambiará,
pero si dejas que se apague,
tal vez vuelvas a encenderlo en el mismo sitio,
pero será otro fuego,
tal vez con restos del anterior,
pero será nuevo.
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